Guadalquivir se anuncia como un largometraje de naturaleza. Este de es muy importante para entender el sentido de este precioso film. La naturaleza es la del río Guadalquivir, eje vertebrador de Andalucía central, un río de mas de 650 km que nace en las agrestes montañas de Cazorla y muere en el Océano Atlántico, al otro lado del Estrecho. Durante dos años y medio, Joaquín Gutiérrez Acha y su equipo filmaron el río y sus habitantes, su lucha por la supervivencia, el dolor y la muerte, pero también el color y la vida. Guadalquivir no pasaría de ser un documental más sobre animales y paisajes sino fuera por el hilo conductor que lo domina.
Un zorro que emprende un viaje imposible de los riscos a las marismas, siguiendo el río al ritmo de las estaciones: el otoño en Cazorla, con sus ciervos en celo, el invierno en Sierra Morena, con sus linces al acecho, la primavera en la marisma, llena de flores. El zorro nos lleva y la voz cálida y suave de Estrella Morente nos cuenta más que nos canta, el relato de esta aventura del río. Una aventura en la que la presencia humana es prácticamente nula y que, cuando aparece, lo hace para demostrar que el hombre es el mayor predador de todos porque no mata por necesidad sino por placer y no lo hace arriesgando la vida, sino utilizando perros mercenario.
Además, aprovechando el momento, comparto con vosotros unas imágenes tomadas en mi última visita a Cazorla.
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